El efecto ‘’Orwell’’ es una cuestión acerca del
poder de los regímenes totalitarios para difundir creencias que llegan a estar
firmemente arraigadas en las sociedades de dichos regímenes y que el escritor
de Rebelión en la granja, George
Orwell, refleja en esta y en el resto de sus obras. Noam Chomsky retoma esta
pregunta y desarrolla algunas de sus reflexiones más importantes en su libro El Conocimiento del Lenguaje.
Chomsky señala el papel fundamental de la propaganda
como medio de transmisión de las ideas de un sistema y el complejo nivel de
desarrollo que ésta ha llegado a alcanzar. Los integrantes del Partido
Nacionalsocialista alemán ya se dieron cuenta de ello y llegaron a utilizar la
propaganda como una de sus armas más eficaces y efectivas de sometimiento. Tan
importante consideraban este medio de propagación de ideas que el 11 de marzo
de 1933 establecieron el Ministerio de Propaganda y nombraron ministro del
mismo a Joseph Goebbels. A través de las revistas, los libros o documentales
como los dirigidos por la cineasta Leni Riefenstahl que muestran técnicas
innovadoras en el cine hasta entonces nunca vistas, consiguieron que gran parte
de la población alemana fuera, de una forma o de otra, partícipe de su
ideología.
Por otro lado, Chomsky no quiere dejar de destacar
el poder de la palabra cuando se trata de convencer. Los nazis también eran
grandes conocedores de esto, por lo que organizaban multitudinarios encuentros
donde Hitler y otros dirigentes nazis pronunciaban discursos cuyo mensaje
llegaban al público no tanto por su contenido, sino por la forma en que era
contado, y es que otro punto importante del efecto Orwell es la manipulación de
la lengua para conseguir la respuesta que se quiere por parte del receptor.
El filólogo alemán Victor Klemperer hizo una crítica
excelente al lenguaje usado durante el tiempo en que los nazis estuvieron en el
poder en su libro LTI, la Lengua del
Tercer Reich. Le da importancia desde un principio al hecho de que en los
discursos o mensajes emitidos desde el totalitarismo no se tenga en cuenta a
cada individuo. Todos están escritos en personas del plural, dirigidos a un
conjunto. Dar protagonismo a cada persona o dirigirse a ella en singular puede
ser peligroso porque puede entonces desarrollar ideas diferentes. Pero cuando
pertenece a un conjunto en el cual nadie piensa por sí mismo resulta más fácil ser sometido.
Pero no es necesario tomar como ejemplo regímenes
totalitarios. Las democracias también se sirven del efecto Orwell y de sus ‘’armas’’
con los ciudadanos. Chomsky sostiene que ‘’la
propaganda es para la democracia lo que la violencia es para el totalitarismo’’.
Quizá en la democracia tenga incluso consecuencias peores puesto que podemos
convertirnos en instrumentos de forma involuntaria o voluntaria de ‘’lavados de
cerebro’’ cuyo efecto llega a ser más duradero que el de la violencia utilizada
en un determinado momento.
También en una democracia los dirigentes manipulan
el lenguaje para conseguir sus intereses. Cuentan para ello con la prensa, al
servicio del gobierno en la mayoría de los casos. Como José Antonio Millán
quiere reflejar en su artículo ‘’Una
pregunta clara, explícita y aceptable’’ para el periódico El País, hay muchas formas de plantear
una pregunta y una gran parte de ellas transforman la realidad o pretenden esconderla
tal como es al receptor, para así hacerlo más susceptible a que éste responda
lo que se quiere.
Fuentes:
- Wikipedia https://en.wikipedia.org/wiki/Nazi_propaganda
- El Conocimiento del Lenguaje, de Noam Chomsky. ''Notas sobre el problema de Orwell''.
-LT: La Lengua del Tercer Reich, de Victor Klemperer.
-''Una Pregunta clara, explícita y aceptable'', de José Antonio Millán. El País. http://elpais.com/elpais/2012/10/22/opinion/1350905411_944337.html
Muy interesante! No había escuchado de eso antes, muchas gracias Ana!
ResponderEliminarMe Gusta mucho Ana muy bueno :)
ResponderEliminarGracias chicos, acabo de ver los comentarios ahora!! jjaja :D
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